LA DESPEDIDA.


Hace mucho tiempo habría creído que podía despedirme de tí. Y hubiera vuelto a buscarte siempre a pesar de eso.
A estas alturas, entre tu relación y la mía, ya no sé si nos vamos a volver a ver o no. Ha sido mucho tiempo yendo y viniendo, tanto tú como yo, uno hacia el otro (aunque honestamente casi siempre fuí yo, yedo hacia tí) y llegué a un punto en el que me dí por vencida y decidí no moverme.
Creo que lo notaste, después de todo, tú lo dijiste, ya no fue lo mismo.
A veces extraño la forma en que me sentía a penas llegaba a tu casa. 
Era como mi refugio. 
Era como ponerme a salvo de mí misma, y sólo estar ahí, aunque no tuviera ningún sentido, me calmaba.
Alguna vez llegué a pensar que realmente había algo entre nosotros, pero siempre, y te agradezco enormemente por eso; siempre me hiciste saber quién era y quién nunca iba a ser en tu vida.
Hace mucho tiempo habría creído que podía despedirme de tí. Y hubiera vuelto a buscarte siempre a pesar de eso.
En este momento, si lo que quieres es que la despedida sea definitiva, no haré nada que afecte tu decisión. Intentaré cumplir tus deseos.
Gracias por todo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

TU LUZ

LO AMAS ASÍ...